Palencia Entre Líneas

Cuatro apuntes sobre un sentimiento y una forma de vida: la nuestra. Palencia existe, se ve, se toca y se disfruta. Es un modo de vida.

23 febrero 2010

Está pasando un mal rato

Hablo de Sergio Asenjo. Con tan sólo 20 años ya va por delante del que, se decía, sería una de las grandes promesas del fútbol español, palentino también: Diego León, actualmente jugador de Las Palmas, muy lejos de donde se habían puesto las expectativas sobre él cuando era internacional con las categorías inferiores de la Selección. Asenjo lo está pasando mal.
Podíamos escuchar el domingo por la noche en El Larguero, de la Cadena Ser una entrevista que ya apetecía escuchar, en el que De la Morena le preguntaba por lo que más podría inquietarnos: el palentino, ¿cómo está? Asenjo fue muy claro con su discurso. Vino a decir que era consciente de que sólo tenía 20 años, de que tenía toda una carrera por delante, de que el público del Calderón lo mismo te pita cuando lo haces mal como te aplaude el día que lo haces bien. Todo eso después de que Quique Sánchez Flores, su entrenador, tras el partido frente al Getafe, confirmara que el portero de los próximos partidos sería De Gea ("para consolidarse, necesita partidos", dijo). No quiero imaginar la rabia con la que Sergio acataría esas palabras.
Está pasando una mala racha: salvando el partido frente al Almería del pasado domingo, está teniendo actuaciones regulares, lejos de lo que podría esperarse de uno de los porteros más prometedores del momento. Ahora parece que el que tiene futuro por delante es De Gea, no el palentino, al que, por cierto, no le faltan intereses de equipos ajenos, por si quisiera cambiar de aires.
Fue, en parte, un alivio escuchar sus palabras, propias de un futbolista maduro, que se enfrenta ante un momento amargo en su corta carrera. Pero, según me cuentan, Asenjo está "muy jodido". Que se lleve bien con De Gea es cierto, pero está mal, anímicamente mal. La noria ha bajado muy deprisa. Aunque el Atlético dé la imagen que da, no es mal club para un palentino procedente del Real Valladolid, que tenía ofertas para irse más lejos y que, sin embargo, prefirió algo más prudente. Hizo bien. No es la única entrevista que ha dado desde el día frente al Almería. Quizás repetir sus palabras una y otra vez sea la forma de creerse de corazón lo que dice.
La carrera de un futbolista es muy corta, pero talento tiene. Y como ha dicho Valdano de Kaká: "el talento acabará por verse tarde o temprano en el terreno de juego". ¡Ánimo, Asenjo!

22 febrero 2010

Algo habrá

IMÁGENES: Palencia Basket y El Norte de Castilla
Es de estas cosas que, no sabes por qué, pasan, pero es como si ese día estuvieras bajo una estrella.
Es difícil que Palencia aparezca en el titular de alguna noticia, pero en plena vorágine currantil de un viernes, aparece un teletipo de Europa Press que destaca, por encima de todo, que "El Palencia da la sorpresa y vence al líder Melilla". Efectivamente, 70-63, con un pabellón que, como de costumbre, registra unas buena entrada. Que se venía de hacer un partido lamentable ante el Orense (62-85) de los que, si estás en la zona baja, te sentencia por la sensación con la que sales. Y, sin embargo: ¡el Palencia da la campanada!
Según la clasificación de la FEB, estamos en la zona de permanencia. No está mal, siempre es bueno depender de uno mismo.
Algo parecido, pero en mayor grado "raruno", que diría el otro, es lo que le pasa al Palencia, al de fútbol: ¿Cómo es posible que sacando 4 puntos en los últimos 6 partidos sigamos en puestos de play-off de ascenso? Cuando te levantan en casa en los minutos finales un partido que llevas ganado es para replantearte lo de volver a pasar por el examen para el título de entrenador. En cada partido hay una excusa creíble: "jugamos en Barakaldo, punto con sabor a victoria", "recibimos al Éibar, que no está mal el empate", etc, etc. Lo del Athletic B y lo de Sestao ya empieza a mosquar, pero lo de ayer ya te destroza. No hay más que ver el foro de la web oficial para medir el pulso de la afición palentina: palos, palos y más palos a Pepe Calvo al que tildan de "cagón" (y no es sólo por la dinámica del partido contra el Mirandés). Otra vez los mensajes de ¡Villegas Dimisión! y las voces que se alzan recordando que venimos de Tercera.Señores, tranquilidad, seguimos dependiendo de nosotros mismos... Algo habrá ahí, que nos hace seguir con la estrella que no nos vino de serie. Hay que estar con los cinco sentidos para no estrellarnos. ¿No merece la pena el esfuerzo?

16 febrero 2010

El Parche: Parte Dos... ¡Acción!

Estamos a mediados de febrero, momento en el que ya se han aprobado multitud de nuevas obras para Palencia. Si el año pasado hubo quejas por el incremento de rotondas, de calles cortadas, de zanjas, de baches, de carriles - bici de aquella manera (por medianas y por aceras, ¡ole!), este año promete ser "elegante", como diría un amigo mío.
24 nuevas obras, 9 millones de euros, y (algo bueno tiene que tener) algunos trabajadores ocupados que, tal como pinta todo, no está mal. El Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local vuelve a dejarnos en Palencia una cantidad generosa de inversión con la que, entre otras cosas, se van a poner más vallas a la Plaza de León, se van a construir carriles - bici unidireccionales en las Avenidas Valladolid y Madrid, muchos polideportivos, mejoras en los accesos a la ciudad, etc, etc. Como ya no se pueden hacer más rotondas porque no caben, lo que sí se va instalar es una serie de pulsadores en los semáforos. Parece que esta vez no habrá tanto jaleo. El resto de obras y proyectos ya aprobados pueden consultarse aquí.
Volveremos a ver cartelones de Plan E y similares en algunos rincones de nuestra ciudad, que anuncian a bombo y platillo lo que no deja de ser la segunda parte de una serie de medidas que no son sino un mero parche a una situación económica desastrosa. A Heliodoro no le queda otra que seguir a rebufo de los planes de Zapatero.

15 febrero 2010

Lo mejor de nuestro carnaval

Lo mejor de nuestro carnaval se come: Hojuelas, Orejas u Orellas (en Galicia)... Orejuelas de toda la vida para nosotros. Postre típico palentino, aunque su fama y fabricación sobrepasa nuestras fronteras. Típicas de carnaval, crujientes, con su puntito dulce, sabrosas, perfectas para cualquier hora del día.
Se encuentran en las reposterías más céntricas de nuestra capital a unos 20 euros el kilo y en las casas donde se cultivan, por estas fechas, una de las tradiciones más deliciosas de nuestra tierra.
Muchos las probaron por primera vez en casa de alguna abuela, en alguno de nuestros pueblos, donde lo tradicional tiene más arraigo si cabe.Una masa a base de huevo, levadura, harina, anís, azúcar, aceite, y algún licor más o incluso ralladura o zumo de naranja. ¿Quién no se ha comido un pellizquito en crudo y ha preguntado si "esto podría comerse así"? Una masa que sólo después de haberla probado sabemos si está buena o no. Las mejores orejuelas surgen de las manos más experimentadas y, sobre todo, de las más pacientes: las que mejor y con más mimo trabajan la mezcla de la que van a surgir las mejores tiras que echar sobre una sartén con aceite al rojo vivo para que se doren, esperando la lluvia de azúcar, en función de lo goloso que sea quien se pida eso de "yo se las echo", aunque no falta quien deja el azucarero cerca de la bolsa o bandeja donde se almacenan una vez hechas, por si apeteciera una dosis extra de dulce.
Suelen ser un reclamo para que los exiliados volvamos, aunque sea por un día, a nuestra casa: "Este año tenemos orejuelas". A por ellas se ha dicho.

11 febrero 2010

Ventanas con los cristales sucios

Peco de ser demasiado romántico con Palencia. Llegar en mis días de descanso y comprobar que el tiempo cunde muchísimo más que en cualquier marabunta urbana es realmente agradable. Más si el bolsillo se resiente menos. Si, además, la compañía ha sido buena, vuelven los fantasmas del "¿Qué he hecho yo que no me he quedado aquí?". Lo dicho: puro romanticismo. Ésta ha sido de las veces en las que uno se topa más de bruces con la verdadera realidad de quien vive día a día.
Hay cosas que no cambian: las calles, el ambiente, las plazas... Ni tan siquiera los recuerdos que me forjaron como palentino. Pero cambian las personas, y el tiempo vuela: ver a una niña más pequeña que yo con la que iba al comedor del "cole", ahora con su bebé en el carrito; al típico chaval raro del instituto con nuevo look con el que, a buen seguro, ha encontrado su hueco en el mundo. Cambian las vidas de las personas y, en el momento que vivimos, no siempre para bien: el miedo ha llegado hasta aquí, donde parece que los males grandes no llegan nunca, y es que cuánto decimos eso de "Palencia es pequeña". La sombra del desempleo y la incertidumbre de no encontrar otro trabajo a corto plazo nos ha dado de lleno. Me dicen de un camarero que sufre por si el café del cliente que sale por la puerta es su último en el bar. Me cuenta un ebanista que le preocupa si la reforma de la habitación que su cliente siempre mentó, ha quedado aplazada para "cuando haya dinero" o le aprietan más en el presupuesto, "aunque lo que importa es que te pidan que trabajes".
En la provincia, la desesperación de algún Ayuntamiento llega al deseo de convertir su pueblo en una escombrera residual peligrosa y otros siguen viendo el pasar de los días sin que ninguna mente lúcida quiera o pueda encontrar con la llave para abrir la puerta por la que huir de la angustia del presente.
Las sombras ganan espacio a las luces. Las ventanas con vistas al futuro tienen los cristales sucios, por eso a veces parecemos ver fantasmas: apariciones que nos hacen dudar de todo lo que nos rodea, y hasta nos hace cuestionarnos a nosotros mismos.

03 febrero 2010

De la Calle y en la calle

La Morenilla tiene trabajo. No ha pedido nada nuestro Alcalde: lucidez para dirigir el futuro de Palencia y salir de la crisis. Casi lo que piden hasta los han perdido la fe, no sólo en cualquier tipo de Dios, Virgen o Santo, sino en los propia clase política.
"De la Calle" la llamaron... y en la calle está el protagonismo por desgracia. La festividad de Nuestra Santa Patrona coincide con el día en el que se sabe que el paro ha seguido en aumento, y que en Palencia hay apuntadas otras quinientas personas más. Es difícil que cualquier Alcalde pueda sacar más o menos adelante la situación de su tierra si no es con el respaldo del Gobierno central, y ahora mismo sabemos que España no es que esté lejos de ese ficticio momento "Champions de la Economía", sino que todo el mundo sabe que estamos en descenso a Segunda División. Así es difícil. Y cuando algunos dejamos de creer en la política por todo lo que se ve por ahí, los políticos piden al más allá o al de más arriba.
Bastante con que no cierren las empresas que tenemos, con que no falte formación para todos, con que no falte el respeto entre unos y otros, y con que nos hagamos la vida un poco más fácil, en el día a día, sería suficiente, en lo que vienen tiempos mejores.
El día permitió, al menos, que Palencia, con el buen tiempo por bandera, viviera una jornada diferente, para trabajadores, estudiantes y también para desempleados. Las fiestas están para eso, aunque a veces el cuerpo no esté preparado cuando las cosas no van del todo bien.
No voy a referirme esta vez al acto de la matanza en la Plaza Mayor al que me he referido en alguna otra ocasión, donde siempre hay quien protesta (algunos de ellos comen carne de cerdo), para no variar. El tiempo dirá, como sucede con la tradición de la caza, de la pesca o los toros, si gusta o no gusta. Lo que está claro que un buen pincho de morcilla no se lo salta un gitano.
Morenilla, Morenilla: ya que nos falta la fe, que no nos falte la esperanza.