Renfe engaña descaradamente el día de la huelga
Miente porque, por un lado, ha habido un 33 % de trenes que han sido cancelados. Y, por el otro, ha habido "la otra huelga", la encubierta, en la que sí se han registrado retrasos notables. Trenes procedentes de Madrid (con destinos Vitoria y León) que han llegado a Palencia con hasta dos horas de retraso. El número de información (un 902, de cobro) ha estado constantemente comunicando, mientras que los retrasos en las salidas, según los trabajadores de los puestos de información, "no tienen nada que ver con la huelga". Sí, claro, igual es que había que cambiar alguna rueda pinchada.
CGT denuncia a Renfe por no haber ofrecido información a los medios sobre estas intenciones de paros y evitar así que los usuarios, perdujicados siempre que los "treneros" o los "avioneros" deciden ponerse en huelga para reclamar no sé qué (que protesten, que no trabajen, pero que no toquen los ...), hubieran podido escoger la alternativa más oportuna. De hecho, no se ha sabido nada de la huelga hasta hoy mismo. Perfecto, donde más duele.
¿Y va a pasar algo? Seguramente no: los sindicatos tendrán que seguir convocando paros, RENFE y Fomento harán lo que les brote los usuarios seguirán perdiendo tiempo y dinero... ¿Y pasa algo? Nada. Este país es lo que tiene: nunca pasa nada. Y si pasa, se le saluda. Ahora, eso sí, en la peluquería de mi barrio tienen que pagar canon por poner la radio porque si no, a mi buen amigo Jesús, se le cae el pelo. De pandereta, oiga, de pandereta.